Mucho antes de poner un pie en el continente y derrotar a los neandertales por cientos de miles de años, otras especies de humanos antiguos una vez acecharon los bosques de Europa. Ahora los investigadores han sido capaces de datar fósiles humanos más antiguos que se han encontrado en Europa Occidental, y llegaron a la conclusión de que poseen la impresionante antigüedad de 1 millón de años.
Los fósiles se descubrieron en un sistema de cuevas en el norte de España, y anteriormente se habían atribuido a las primeras especies conocidas de homínidos encontradas en Europa, Homo antecessor. Usando los sedimentos, junto con los huesos de los animales encontrados junto a los fósiles humanos, los investigadores pudieron hacer una estimación de la antigüedad, pero un nuevo estudio publicado en Geocronología Cuaternaria ha dado fechas concluyentes.
Utilizando uno de los dientes de los fósiles humanos, un equipo de científicos de España, Francia, China y Australia ha fechado los restos entre 772.000 y 949.000 años, convirtiéndolos en los restos humanos más antiguos jamás encontrados en Europa Occidental. Algunos fósiles de homínidos que se cree que son más antiguos se han encontrado en otros sitios, pero ninguno de ellos se puede atribuir a una especie específica.
Se cree que Homo antecessor fue la primera especie humana en llegar a Europa. Otros homínidos antiguos ya habían emigrado de África, como el Homo erectus, pero se cree que fueron al este, llegando a China y al sudeste de Asia, donde tuvieron un éxito increíble.
Pero se cree que Homo antecessor se fue en otra dirección. Ahora se confirma que hace un millón de años estaban en España. Esto es fascinante, ya que encaja perfectamente con lo que se cree que es el conjunto de huellas humanas más antiguas que se encuentran fuera de África. Descubiertas por una fuerte marea en la costa de Norfolk, Inglaterra en 2013, las huellas se conservaron en la suave arena y datan de unos asombrosos 800.000 años de antigüedad. En cuestión de semanas fueron destruidos por la marea que regresaba.
A medida que una población de Homo antecessor se trasladó a Europa y otra se quedó en África, es potencialmente el último ancestro común entre nuestra propia especie y los neandertales. Sin embargo, es difícil estar seguro de esto, ya que algunos argumentan que podría ser una forma primitiva de Homo heidelbergensis, mientras que otros todavía piensan que la especie puede representar una especie completamente dentro del linaje propio de los neandertales.
La única forma en que es probable que se resuelvan estas preguntas es si descubrimos más esqueletos y potencialmente extraemos ADN antiguo de los fósiles.
El estudio científico ha sido publicado en la revista Geocronología Cuaternaria.