Los investigadores han encontrado un antiguo calendario tallado en piedra que ha permanecido oculto durante casi mil años.
Según los expertos, lo más probable es que crearan más de 1.000 petroglifos como una forma de «rastrear el tiempo» usando el sol.
Los arqueólogos dicen que la losa de arenisca en el Valle Verde de Arizona puede haber servido como un calendario o reloj hace cientos de años, marcando el paso de las estaciones y el inicio de importantes períodos agrícolas por la posición del sol.
Al comienzo del verano y el día más largo del año, dos rocas proyectan una sombra sobre las raíces de una planta de maíz, y dejan a dos figuras bailando bañadas de luz; seis meses después, el sol en su lugar brilla a través del espacio intermedio.
El antiguo calendario pasó desapercibido durante siglos, hasta que fue redescubierto por voluntarios en el sitio en 2005, según informó la BBC.
Aproximadamente 1.000 petroglifos fueron tallados en la roca hace 900 años atrás por la gente del sur de Sinagua, según el Arizona Daily Sun.
A medida que cambia la posición del sol en el cielo, su luz y las sombras proyectadas por las características de la roca se alinean con imágenes específicas que tienen importancia agrícola o ceremonial.
Los petroglifos destacan los equinoccios, solsticios y otras fechas importantes a lo largo del año.
También hay símbolos en espiral que probablemente representen al «padre sol», dijo Kenneth Zoll, director ejecutivo del Centro y Museo de Arqueología Verde Valley, a AZ Daily Sun en 2016.
«Esta fue una forma de rastrear el tiempo», dijo Zoll, durante una demostración reciente del notable calendario, informa la BBC.
El calendario de Sinagua en V-Bar-V no es el único de su tipo; en el Valle Verde, hay al menos una docena de otros sitios que podrían haber sido utilizados por personas antiguas para marcar el paso del tiempo.
Estos pueden haber sido el trabajo de los viajeros, que enseñaron a los lugareños en otros sitios cercanos cómo seguir al sol, informa la BBC.
Pero, mucho sobre los sitios antiguos sigue siendo un misterio.
Cerca de allí, los hopi que descendieron del Sinagua dicen que las imágenes en el sitio se alinean con sus propias tradiciones que viven en la actualidad.
El 21 de abril, por ejemplo, el borde de una sombra descansa sobre una imagen de un tallo de maíz, y esta fecha marca el primer día de plantación entre los Hopi, según la BBC.
Y, el 8 de julio, que pone fin a un período de oración y meditación de 16 días, el sol ilumina una figura danzante.
«Me siento orgulloso porque nuestros antepasados dejaron estas marcas. Todos los meses tenemos ceremonias diferentes y suceden cosas diferentes», dijo el anciano hopi Floyd Lomakuyvaya a la BBC.
«Ese es nuestro calendario. Nos guía».
